La precandidata presidencial a las Primarias María Corina Machado afirmó que ni los oficiales honestos de la Fuerza Armada Nacional, ni la mayoría del pueblo venezolano permitirán que el ministro de la Defensa, Henry Rangel Silva, desconozca el triunfo de la alternativa democrática el próximo 7 de octubre.
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Machado, quien hizo una visita a Macarao, en el oeste de Caracas, rechazó así al nombramiento de Rangel Silva como titular de la cartera castrense, hecho público el viernes en la noche por el presidente Hugo Chávez en la basílica de Nuestra Señora de la Coromoto en Guanare.
La diputada prometió que desde el Poder Legislativo vigilará la actuación de Rangel Silva como ministro.“No voy a opinar sobre los méritos militares que obtuvo este oficial, pero su nombramiento es un desatino y una provocación. En primer lugar, Rangel Silva fue cuestionado por la opacidad en el manejo administrativo de los cargos que ha ocupado; en segundo lugar, ha declarado públicamente el desacato al artículo 328 de la Constitución al jurar lealtad a una persona y no a la Nación, y en tercer lugar ha amenazado al pueblo abrogándose el derecho de desconocer al nuevo comandante en jefe de la FANB, lo que significa que él ya sabe que la voluntad popular se va a expresar a favor de un cambio”, afirmó.
La precandidata agregó: “Ese nombramiento pretende enlodar el buen nombre y prestigio de nuestra FANB y pretende desmoralizarnos. Nosotros no permitiremos la concreción de esa amenaza nacional y mucho menos la mayoría digna de la FAN”, aseguró.
“Las armas de la República, cuya custodia ha recibido, están al servicio de la Patria y no de un hombre o un proyecto político”.Machado prometió que en su gobierno los valores sobre los que se asienta la institución militar -subordinación disciplina y obediencia- serán respetados y valorados, que sus méritos y la profesionalización serán reconocidos mediante los ascensos que se correspondan con su escalafón y su desempeño. “Ese juramento de defender la Patria hasta con la vida si fuera necesario que hicieron al toque de silencio es para nosotros un valor que representa el honor del militar”.
Machado criticó finalmente el lugar escogido por el Presidente para anunciar a su nuevo colaborador. Lo calificó como “un irrespeto a la Iglesia católica y a los feligreses”. Rogó a Dios que proteja a la familia venezolana de la amenaza de desintegración de la Nación que pretende el gobierno con el nuevo cargo dado al general en jefe.
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